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TURNING RED

  • Foto del escritor: CineFilm Club
    CineFilm Club
  • 16 mar 2022
  • 5 Min. de lectura

2022 / Dirigida por: Domee Shi



Estamos ante una película animada de Pixar, y como tal siempre sus producciones intentarán hacernos consientes de algún tema en específico y de plantearlo desde el contexto familiar o el de la amistad. Y entonces llega Red, para seguir esa misma línea, pero siendo transgresora en muchos sentidos, y aún así sintiéndose con esa misma calidad y empatía.


Nos narra la historia de una niña de 13 años llamada Meilin, quien irá pasando por diversos cambios que solo parecerán complicarse cuando de pronto se transforma en un panda rojo que resaltará sus pensamientos y sentimientos más profundos durante una edad que significa muchos cambios.


Lo que podemos apreciar al primer instante es la estética de la cinta, que además de tener una animación sublime, cuenta con muchos detalles preciosos que no solo aluden a la época dosmilera si no que también a caricaturas "del ayer y hoy" como los ojos que emulan a muchas series animadas asiáticas, o la superposición de textos describiendo o señalando a alguien o algo, que normalmente vemos en animación 2D pero aquí adaptado, y luego tenemos esas épicas secuencias del papá de Meilin cocinando, se ve delicioso y por lo menos a mí, me dieron ganas de probar eso y lo que sea que me presentaban en la pantalla, podía parecerme más apetitoso incluso que la comida en la vida real. Y es que son todos esos detalles los que le brindan el extra, sin mencionar otros detalles como objetos o elementos propios de la época como la mascota en su tamagochi, el fanatismo por boybands pop que imperaban incluso desde antes de la época plasmada, las formas de comunicarse, de vestir, en fin; que resaltan mucho y fue muy agradable percibir toda la ambientación.


Ahora, las situaciones que ponen en aprietos a la protagonista son una gran ejemplificación de lo que muchas mujeres pasamos a esa edad, vivimos cambios de humor, cambios hormonales, comenzamos a interesarnos en cosas nuevas, diferentes; a las que nuestras mamás y papás no están acostumbrados a vernos, pero que son parte de nosotras, son parte de existir, creces y vas cambiando de ideas, comienzas a decidir por ti qué es lo que te gusta y qué no, cómo deseas pasar tu tiempo libre y qué otras cosas ya no te llaman tanto la atención y de forma muy concreta esta película retrata eso, los cambios.


Me pareció muy acertado cuando incluso sus amigas perciben la vida de Meilin no es como ella se quiere hacer creer, pues al inicio ella se muestra como una niña independiente, con decisión y desenvuelta, pero al mismo tiempo esa llamémosle "fachada" no es más que una cubierta para todas las presiones con las que tiene que convivir, con una mamá que está todo el tiempo al pendiente de ella, de que no se pase ni un minuto de la hora a la que tiene que llegar para ayudarle con el negocio familiar, que tiene que sacar buenas notas, que no puede expresar sus verdaderas opiniones por miedo a decepcionar a sus padres, que sus gustos y amistades no son algo que puede disfrutar mas allá de las horas familiares, en fin que todos a su alrededor podían percibir como la "controlan" en casa. Y es hasta que ella decide alzar su voz y expresarles que hay cosas que solo a ella le gustan, que hay cosas que quiere hacer y eso está bien, ahí podemos vislumbrar un cambio, pero que si vemos no es uno muy grande pero es el comienzo ideal para darle la bienvenida a una nueva etapa de su vida.


El personaje de la mamá por otra parte me sorprendió por lo increíblemente exaltada que llegaba a estar, humillando a su hija frente a un muchacho al que ni siquiera le había dirigido la palabra solo por haber encontrado unos dibujos qué, bueno, sin duda esa escena fue la más desesperante e incómoda de todas, me quedé pensando "señora, por favor, eso simplemente no era necesario, ¿porqué no habló con su hija primero?" No se detuvo a escucharla y Mei tampoco intentó hablar más, se limitó a ver como su madre la exhibía en frente de desconocidos.


En el caso de las amigas de Mei aprecié mucho como dotaron a todas de personalidades tan bien definidas, con estilos diversos; cómo ninguna se parecía a la otra pero compartían gustos e ideas y su cariño entre ellas, y el que fueran tan diferentes entre sí las complementaba e incluso aportaba a su amistad, es un rasgo muy bonito y me encanta que se sigan representando mayor diversidad de tipos de personas en los que nos podamos sentir identificadas y parte de la sociedad en la que vivimos, que está plasmada de diversidad.


La cinta nos habla de la empatía en muchos sentidos, de lo importante que pueden ser las amistades sobre todo en momentos tan decisivos de nuestra vida, y para ejemplo está esa edad en la que los cambios son muy repentinos y abrumadores, como con la menstruación, un tema en el que es crucial estar rodeadas de personas que nos hagan sentir cómodas y escuchadas. Y apropósito de que el filme nos hable por primera vez abiertamente de esto, es también la primera vez que vemos en una película de Disney toallas femeninas, y vaya que sorprendió, pero para bien, pues si bien habrá algunas personas, por demás hombres que no se sientan conformes con ello, la realidad es que todos sabemos de su existencia, y es una introducción muy bien hecha para los más jóvenes de que es algo que está ahí, que es normal y que a todas las mujeres nos sucederá en algún punto, si bien la mamá de Mei también se pone un tanto histérica cuando menciona el asunto, pues me parece que también juega como una buena representación de cómo algunas personas pueden reaccionar, cosa que ni bien ni mal, sucede. Y en ese sentido se nota y se siente el trabajo realizado por las mujeres detrás de esta entrega, la película no se detiene a dar explicaciones todo fluye de forma orgánica dentro del propio ritmo de la misma, se aprecia el trabajo bien informado y eso también se aprecia.


En el aspecto musical creo que fue muy bien llevado, la banda sonora cumple muy bien durante toda la trama y las canciones que pertenecían a 4°Town quedaron excelentes, una de mis partes favoritas de la película es justamente cuando ellos comienzan a cantar en armonía con las tías de Meilin, creo que tomaron grandes elecciones en la producción de esta cinta, incluso con el fandom de la boyband con el que verdaderamente muchas personas también nos podemos sentir identificadas y más ahora con la enorme cantidad de grupos musicales de todo el mundo a los que podemos seguir con una fácil accesibilidad.


Y para concluir, creo que estamos ante una gran producción, una cinta memorable que tiene muchos recursos que ayudan a la reflexión de manera divertida o también incómoda pero por motivos diferentes. Es para cualquiera que busque ver algo distinto y que esté dispuesto a no caer en prejuicios. Vale el tiempo invertido y estoy segura que si la miras más de una ves encontrarás más detalles interesantes.


YL

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